Hola amigos y seguidores del blog, este domingo fui a probar suerte al río como de costumbre. Después de unas horas pescando, me tropecé con el zancado, muchos pescadores noveles lo confunden con un salmón de entrada pero lo hacen simplemente por no querer creerlo. Ni da la batalla, ni luce el aspecto saludable y hermoso de un salmón fresco. Nuestro salmón atlántico no muere tras el desove, un porcentaje se salva y desciende nuevamente por el río hasta el mar. Se trata de un salmón que ha cumplido con su ciclo reproductivo. Están muy flacos y suben rápidamente a la superficie. Es un ejemplar que debemos devolver al agua sin dilación ni titubeos. Solo con pensar que en unos años podría regresar al río con unos 10 o 12 kilos de peso es razón suficiente como para manejarlo con cuidado y devolverlo a su medio sin perder ni un segundo. Por eso, apague la cámara y no saque fotos del ejemplar. Le quite el anzuelo y lo solté sin demora. En el caso de que trague el anzuelo es recomendable cortar el aparejo lo más cerca de su boca y soltarlo rápidamente.
Espero que os guste...
Ya sabéis que hacer si os pica uno. Un saludo
Buena explicación no sabia lo que era un zancado, porque mi ignoracia en agua dulce es mucha. Y mejor aun el gesto de la suelta.saludiños.
ResponderEliminarGracias Tanero, espero que te haya gustado. Un saludo.
Eliminarenhorabuena Alfonso pues yo me entero ahora tambien de lo del zancado ..pero como dicen por ahi nunca te acostaras sin saber una cosa mas...un saludo...
ResponderEliminarGracias Cabo, ya te iré poniendo al tanto. Un saludo.
EliminarUn buen gesto por tu parte, ojalá te vuelvas a encontrar con el y te recompense con una buena batalla.
ResponderEliminarUn abrazo
Dios te oiga Raul, gracias y un saludo!
Eliminarpense que la palmaban todos tras el desove, buen video, s2
ResponderEliminarLos que la palman son los de los documentales de la 2, jejeje. Un saludo Vitu.
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