Por otro lado, hoy os voy a contar como preparo el cebo para la pesca del salmón.
Lo principal es, que el cebo este fresco. En primer lugar nos hacen falta quisquillas vivas, unas pocas las dejaremos como están y otras las coceremos en agua hirviendo con dos o tres puñados de sal gorda unos 5 minutos aproximada mente, se ve que las quisquillas cojen el color adecuado una vez que salen a flote. La sal les da la dureza necesaria y deseada. Unas cuantas se pueden teñir con anilina en el color que deseamos y otras se pueden dejar cocidas. Así tendremos varias opciones con las que tentar a los salmones. Las que no vayamos a usar se pueden congelar y así tendremos buen cebo para próximas salidas de pesca.
Es imprescindible llevar unas cuantas lombrices de tierra (merucos, morugas o miñocas) para acompañar las quisquillas.
Quisquillas frescas
Quisquillas en viruta de pino y a la nevera.
Nos duraran unos tres días máximo.
Lombrices en musgo, para mi, la mejor opción
para su manejo.
Aquí vemos 2 morugas y 2 quisquillas cocidas listas para pescar.
Espero que estos datos os sirvan de ayuda.
Os dejo unas fotos de estos días que anduve probando suerte por el Cares sin éxito, con buenos recuerdos de lances y salmones avistados pero inapetentes.
Puente Viejo Río Cares
esta bien aprender lgun truquillo de vez en cuando...un saludo amigo.
ResponderEliminarCocer las quisquillas tambien vale para los sargos.
Eliminar:)
Un saludo.